English Version:
Carmen, offered the moms that will be benefited through the Foundation, the opportunity to learn a skill that Carmen and her family have perfected for three generations. Carmen’s family has made delicious crystallized handmade sweets and has traveled from Puebla to the state of Veracruz promoting and selling these delicacies. This could give them the opportunity to start a small business and be able to work on it while taking care of their children, the children can also participate and the moms can sell the sweets in the community or go to other neighboring towns to offer them.
Carmen bought in a local store which belongs to Elizabeth’s family, the sugar, the sweet potatoes, the painting to decorate and stone lime. Other ingredients such as the "Chilacayote" a fruit that grows in Fabiola's yard, which she cut it off from the plant and it was her contribution. Doña Flor brought two pumpkins, Angelica and Edith contributed with firewood, the grandmothers of the children also joined, both Fabiola's mother and Angelica's. Carmen taught them the process of preparing the sweet potatoes, peeling and cutting the fruit, putting it in lime and let it rest for 3 hours.
On Friday, Fabiola offered her house to continue with the classes and the mothers and the two grandmothers met there, improvised a kitchen outside where the children could play under their supervision. They continued with the preparation of the sweets. They added sugar to the sweet potatoes. These sweets are traditional from the state of Puebla. At 6 pm they went back to check on the sweets and met Fabiola's grandmother who also helped preparing the sweets and continued with the preparation of these delicacies.
On Saturday, April 6th , they finished making the sweets. It took three days in total to make them, they were fun and productive days, Carmen was able to share her knowledge in this culinary art and the moms and grandmothers were able to learn a new activity that gives them the opportunity to acquire an extra income to help their families. Very noble gesture of Carmen and the ladies in Tecuanipa really showed a lot of disposition and desire to learn something new!
Versión en Español:
Carmen le ofreció ofrecerles a las madres de las familias que serán beneficiadas por parte de la Fundación, la oportunidad de aprender un oficio el cual Carmen y su familia han desempeñado ya por tres generaciones. La familia de Carmen se ha dedicado a la venta de deliciosos dulces artesanales cristalizados y han viajado de Puebla al estado de Veracruz promocionando estos manjares.
Esto les da la oportunidad a las mamás de emprender un nuevo negocio y poder transmitirlo a los niños, mientras los pequeños participan y los pueden vender en la comunidad o salir a otros pueblos vecinos a ofrecerlos.
Carmen compró en la tienda local de la familia de Elizabeth, el azúcar, los camotes, la pintura para decorar y la cal de piedra. Otros ingredientes como el “Chilacayote”, lo llevó Fabiola pues crece en el patio de su casa, ella lo cortó y fue su cooperación. Doña flor llevo dos calabazas, Angélica y Edith llevaron leña, también se unieron las abuelas de los niños, tanto la mama de Fabiola como la de Angélica. Carmen les enseñó el proceso de hacer los camotes enmielados, pelar y cortar fruta, ponerla en cal y dejar reposar por 3 horas.
El día viernes, Fabiola ofreció su casa para continuar con las clases y las mamás y las dos abuelas se reunieron allí, improvisaron una cocina afuera donde los niños pudieran jugar bajo su supervisión. Continuaron con la preparación de los dulces. Le agregaron azúcar a los camotes. Estos dulces son típicos del estado de Puebla. A las 6 pm se volvieron a citar abuelita de Fabiola quien apoyo también y continuaron con la preparación de estas delicias.
El día sábado 6 de abril terminaron de hacer los dulces. Fueron 3 días divertidos y muy productivos, donde Carmen pudo compartir sus conocimientos en este arte culinario y las madres y abuelas pudieron aprender una nueva actividad que les da la oportunidad de adquirir un ingreso extra para ayudar a sus familias. ¡Un gesto muy noble de parte de Carmen y las madres de familia de Tecuanipa se vieron con disponibilidad y deseo de aprender algo nuevo!
